La celebración, en pleno impacto social y sanitario de la pandemia, del Día de Personas Sin Hogar el pasado 25 de octubre, ha puesto a la luz la realidad de muchas personas sin hogar o de personas que viven en infraviviendas, lugares poco salubres y dignos para poder vivir con cierta seguridad y para quienes es una utopía poder adoptar las medidas de prevención decretadas por las Administraciones.
“No tener casa MATA”
Con el contundente lema “NO TENER CASA MATA”, se quiere llamar la atención de los poderes públicos y de la ciudadanía sobre los efectos que la falta de una vivienda adecuada supone para miles de personas y familias en nuestro país, donde se estima que cerca de 800.000 hogares y 2,1 millones de personas sufren situaciones de inseguridad en la vivienda (VIII Informe Foessa sobre Exclusión y Desarrollo Social en España).
Cáritas conoce de primera mano estas situaciones de precariedad extrema gracias al trabajo de acogida y apoyo que se ofrece anualmente a las casi 40.000 las personas en situación de sin hogar acompañadas desde los proyectos desarrollados en todo el país por el conjunto de la Confederación.